Nuevo film de Sci-fi con un reparto de
caras conocidas y una historia muy plausible. La lastima es, como en
muchas ocasiones, que esta totalmente desaprovechada.
Laurence Fishburne (“Matrix”),
aunque tiene un papel importante dentro de la historia, no deja de
ser un secundario relegando todo el protagonismo a Kevin Zegers
(“Cazadores de Sombras: Ciudad de Hueso”) que no se
desenvuelve muy bien con la que le viene encima. Otro secundario con
peso es Bill Paxton (“Alien: El Regreso”) que seguramente
sea el mejor personaje de la trama: paranoico, violento y con cierto
poder de liderazgo (aunque sea por la fuerza).
Los decorados no están muy logrados,
un abuso excesivo del croma no ayuda y la digitalización de algunas
cosas le dan un aire noventero de telefilm cutre. De todas formas el
producto final entretiene pero no mata, ya que la historia se queda
colgando justo en el final.
Una nueva era glacial condena a la
Tierra. Los pocos humanos supervivientes se agrupan en colonias bajo
la superficie intentando sobrevivir al frió, las hambrunas y las
enfermedades. Un dia sin saber porque una de las colonias pierde el
contacto y deciden ver que a sucedido. Al llegar al lugar descubren
que un grupo de caníbales liderados por Dru Viergever (“Survival
Of The Dead”, últimamente le
tocan papeles de esta índole) han exterminado y comido a los
habitantes del lugar. Al ser descubiertos, los antropófagos siguen
al grupo hasta su colonia y allí se llevara a cabo la lucha final
por la supervivencia.
La
pena es que la cosa no vaya a más y se quede en tan poca cosa. Un
pena.
Para
ver una vez y no más.
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