Uno de los mejores films que rodó
nuestro actor más querido dentro del Fantaterror ( y en todos los
estilos, sea dicho) Paul Naschy. Un especie de remake o versión a
la española del clásico de la Hammer la Momia, pero ya inmersos en
la década de los 70. Consiguiendo que en todo momento nos preguntemos
si realmente es nuestra o pertenece a la productora británica.
Acojonante, muy recomendable para todos los amantes del cine de
terror clásico. Un guión brillante. Unos decorados y una
ambientación impresionante. Y unas actuaciones muy adecuadas. A
destacar el polifacético Naschy que como en muchas otras cintas
tiene que hacer varios papeles.
El film comienza contándonos la
historia del faraón Am-Im-ho Tep, cruel y sádico que reina junto a
su concubina Amarma. Su mayor placer es matar jóvenes en su
presencia. El sumo sacerdote harto de sus crímenes trama un plan
para deshacerse de ellos. Envenena al faraón y mata a la concubina
con una daga. Luego procede a momificarlo en vida para que su alma no
pueda ir a la tierra de los muertos y a Amarda no le da ni siquiera
la bendición de la momifican, con lo cual su alma vagara
eternamente.
Luego pasamos a la época victoriana.
Unos arqueólogos encuentran la tumba del sádico faraón y llevan
todo a Londres para poder ser estudiado. El descubrimiento es todo un
acontecimiento ya que se creía que era una leyenda la existencia del
maldito monarca. Poco después llega a la ciudad una pareja de
egiptólogos egipcios que pretenden ayudar con las investigaciones.
Son Assad y Sannufer, ambos pareja sentimental. Assad es descentiente
de sangre de Am-Im-ho Tep y con la ayuda de Sannufer roban la momia
para revivirla. Para ello tienen que hacer un rito de sangre en que
deben matar a 3 mujeres. Los crímenes se van sucediendo y Scotland
Yard empieza a investigar sin mucho éxito. El faraón necesita más
sangre para revivir completamente y para volver a traer el alma de su
amada, que encuentra entre la hija de uno de los arqueólogos.
Como vemos un guion clásico, para un
largometraje de gran altura.
Hacia años que no revisionaba este
film, y la verdad me ha dejado un gran sabor de boca. Me ha parecido
realmente bueno, de lo mejor dentro del fantaterror español.
Aquí tenemos un film de finales de los
60 producido en Argentina en plena dictadura y por lo tanto realizada
con mucho valor debido a la cantidad de desnudos que contiene.
La película en si es corta de una hora
y cuarto de duración. Pero se hace eterna, yo la había visto hace
años en los tiempos de Alucine en La 2, pero este nuevo visionado me
ha matado y la he tenido que ver en dos veces.
Arranca bien, ambientando en el siglo
XIX. Los padres de Ofelia quieren que se case con su primo Eduardo,
pero ella esta enamorada de Gustavo. Le pide que hable con sus padres
pero este no se atreve. Ofelia decide casarse con su primo.
Celebrando la noche de bodas son atacados por Gustavo que en realidad
es un vampiro. Le atraviesa a Eduardo la garganta con un cuchillo y
muerde a Ofelia mientras aprieta fuertemente una de sus tetas (¿?).
La casa queda maldita. Y la pareja unida.
Aquí es cuando la cosa se desfasa,
pasan los años y nos encontramos en los 60. Guateques, planos raros,
alcohol, tetas y desnudos. Intentado heredar un poco de nuestro gran
Jesús Franco, con mas desacierto que otra cosa, todo sea dicho. Un
grupo de amigos se dirigen a una población pero justamente se quedan
tirados sin gasolina al lado de la casa maldita.
Allí se refugian
para pasara la noche. Uno de ellos buscando comida descubre a lo que
parece que es el mayordomo de la casa y nos encontramos con uno de
los diálogos más graciosos y tontos de toda la película. Al
despertarse al día siguiente, las chicas del grupo han desaparecido.
Un film que tiene momentos, como he
dicho muy tontos, pero que también sabe transmitir momentos de cine
clásico de terror y escenas bien hechas. El problema es que algunas
cosas son muy cutres y ciertos diálogos son de juzgado de guardia.
Un ejemplo más de ello puede ser que queriendo rodar a los vampiros
en vuelo en forma de murciélagos y no teniendo el metraje, usaron el
de unas gaviotas en vuelo con el negativo teñido de rojo. Una
absoluta aberración y un hito porque es el primer film del mito del
vampirismo que esto sucede. Realmente curioso.
También es muy curioso cuando el
vampiro muerde a sus victimas y aprieta los senos de las mismas, pero
lejos de parecer único en ello, uno de los chicos cuando besa a su
novia le aprieta también el seno con fuerza (todo ello, mientras
esta convaleciente en la cama).
Una cinta curiosa, que por momentos ha
envejecido fatal pero que por otros se deja ver. La recomendaría ver
con mas gente para una buena dosis de risas y chistes sexistas malos.
Corría el año 96 cuando me hice con
esta película a través del catalogo Tipo por 1200 pesetas. Yo
apenas tenia doce años recién cumplidos y estaba totalmente inmerso
en el gore y el cine de terror de serie B que llegaba a mis manos. De
aquella había empezado a comprar una colección también en vhs de
clásicos del terror, las dos primeras entregas consistían en Bad
Taste y La Matanza De Texas, su precio abusivo (2500 pesetas las dos
películas) hizo que no comprara mas que dos o tres entregas (no
recuerdo bien), ya que las siguientes solo contenían una cinta. Mi
sorpresa fue mayúscula cuando vi que podía hacerme con un film de
Jesus Franco a ese precio (del que apenas conocía nada pero que su
nombre evocaba grandes misterios y horrores) y así aproveche de paso
a pillarme unos discos de punk y heavy metal .
No me malinterpretéis,
vivía y vivo en un pueblo en el cual los videoclubs (ahora ya no hay
ninguno) no tenían ese tipo de películas y la única manera de
verlas era pidiéndolas prestadas a hermanos mayores de colegas que
previamente habían comprado o haciéndote tu con ellas como pudieras
y copiandolas con dos videos o en la tienda de fotografia del pueblo.
Luego aparecieron catálogos fotocopiados de empresas especializadas
pero hasta entonces era lo que había. También cabe decir que era un
reto convencer a mi madre para que me dejara dinero para comprarme
una peli de terror que no hubiese en el videoclub. No como en estos
tiempos de bonanza de clicks, torrents y descargas. Y donde ya no se
aprecia la posesión física de algo que en aquella época era casi
imposible de tener.
Gracias a esta pude cambiarla por unos días por
otra que muchos conoceréis, Der Todesking, un film que por cierto me
marco mucho. Y más adelante por muchas más que hicieron enriquecer
mi cultura fantaterrorifica.
El paquete llego, lo abri con fiereza y
me detuve a contemplar la caratula, prometía mucho. Jess Franco era
sinónimo de tetas, sangre y horror. Corrí hacia mi video Thompson,
que todavía conservo. La vi entera mientras degustaba un paquete de
kikos. Me alucino, pero de aquella podía tragarme casi cualquier
mierda que fuera del palo. De aquella ya me di cuenta de los enormes
fallos que tenia el film, pero en tiempos de inocencia prefería lo
artesano a lo irreal.
Con el tiempo y gracias a este film me
di cuenta que el director madrileño es muy irregular. Te puede
presentar un film correcto, luego tirarse al porno psicotrópico y
acabar con un film de bajo presupuesto que haga rechinar los dientes.
Este es el caso de La Tumba De Los Muertos Vivientes, un film pobre
de recursos y presupuesto, y con grandes fallos de guion. Pero que
como podéis ver guarda un grato recuerdo en mi corazón y en mi
estantería. Considerándola una de mis más valiosas pertenencias
(sentimentales, porque la venden a 2,50 euros en ebay).
El guion que en un principio se
antojaba la mar de curioso, decaía según el film iba pasado y así
rezaba:
Durante la segunda guerra mundial un
convoy británico espera emboscado en un oasis africano a otro alemán
que transporta un cargamento de oro. Los alemanes son masacrados pero
el oro se queda con ellos (¿?).Por extraño que parezca todo aquel
que se acerque al oasis es atacado por los zombies y no existen
supervivientes. Un grupo de jóvenes guiados por un mapa (de España,
por cierto) van en su busca, pero solo encuentran el horror y el
rechazo de la gente que habita la zona.
La grabación del film se realizo en
Gran Canaria en un pequeño vergel. Es tan infimo el presupuesto que
las escenas de guerra son de otro film y el vestuario de los zombies
nazis no se parece ni por asomo. Aparte de lucir unas hermosas y
largas melenas. El film tiene muy poca sangre. En una escena en que
unos cinco zombies acorralan a una joven, la atacan y parece que
devoran, al retirarse solo vemos un poco de “sangre” por encima
de sus tetas. Ni jirones ni mordidas ni un poco de intestino de
latex, nada. Los maquillajes de lo zombies “heredados” de la
corriente Fulciana, en muchos casos son penosos, pero tengo que decir
que un par de ellos a día de hoy me llenan de alegría por su
artesanía. Y las actuaciones para que hablar, malisimas. Otra cosa
realmente extraña, apenas hay desnudos, solo una par de tetas en
toda la película. Ya sabréis que para el bueno de Jess eso es casi
un pecado.
Un film que intentaba aprovecharse un
poco de la nueva moda de las pelis de zombies en los 70´s - 80´s y
que se quedo en nada más que eso, un mero intento. Pero que como
pudisteis ver para mi guarda un grato recuerdo.
Película de 1985 del aclamado director
Jesús Franco, esta vez intentando hacer un remake muy personal de La
Noche Del Terror Ciego de Armando de Ossorio. Todo sea dicho, muy por
debajo de los 4 films sobre los templarios sin ojos del director
coruñes, y que espero reseñar pronto en el blog, porque, para mi,
son de lo mejor que ha dado el fantaterror español de lejos.
Como siempre ya sabéis lo que nos
vamos a encontrar en una cinta del bueno del tito Jess (salvando unas
pocas excepciones, como Conde Drácula de 1970 ya reseñada en el
blog). Tetas, planos raros, zooms, una historia que por momentos no se
sostiene y un elenco de actores ya repetitivo en su filmografía.
En
este caso Lina Romay: musa, pareja y ayudante de Franco desde que
rodaron Mujer Vampiro en 1973 (o El Ataque De Las Vampiras como
también es conocida). Fallecida este año el 15 de febrero de 2012 a
los 57 años, una pena. Posiblemente una de las primeras Scream Queen
española (por no decir la primera) de renombre internacional tanto
en el mundo del terror como el erótico y de la que encontramos un
sin fin de paginas web y blogs dedicados a su obra y memoria.
Hay que
decir que también tubo sus escarceos con el porno, cosa no de
extrañar estando al lado del director malagueño, y que por lo que
he podido leer no hizo por dinero ni nada semejante sino por puro
placer. Hay lo dejamos porque para ella siempre abra un lugar en el
blog y ya veréis como poco a poco iré subiendo más y más films
protagonizados por ella aquí en Crematorio. En su memoria.
Retomando un poco el tema, el film
trata sobre cuatro chicas que se van de vacaciones a una zona del sur
con playas y reservan en una zona hotelera, la cual piensan que
estará abarrotada. Nada más lejos de la realidad cuando llegan allí
y se encuentran un hotel siniestro y desierto. Capitaneado por Carlo
(Antonio Mayans), el encargado, una persona fría y extraña. Todo se
vuelve más raro aún cuando dando un paseo por la zona encuentran
las ruinas de un monasterio, algo que ellas no dan importancia. Una
de las chicas desaparece, y en vez de preocuparse por su estado,
deciden ir a la playa y posteriormente a la habitación del hotel a
jugar a juegos lésbicos, algo totalmente racional, ¿o no?. En la
noche descubren que un séquito de encapuchados se dirigen a hacer
rituales y cánticos a las ruinas pero tampoco es algo que les asuste
mucho y dan por sentado que serán los lugareños (que no se les ve
en toda la película). Poco a poco Carlo va intimando con una de las
chicas, Candy (Lina Romay) y el juego comienza a desplegarse.
Rodada en las canarias en un complejo
hotelero vació, la película no deja de andar entre la cutrez y la
serie B en cuanto a decorados y maquillajes (los templarios son para
mear y no echar gota). Pero la verdad, en mi humilde opinión, es uno
de los mejores films del bueno de Jess.
Dejando atrás mucha
psicodelia y efectos raros que metía en sus proyectos de los 70s y
centrandose en hacer un film de terror de bajo presupuesto pero
resulton, El guion es flojito, peca muchas veces de incoherencias y
fallos. Parece que esta hecho a trompicones, pero tiene algunos
diálogos que son la caña. La despedida de Carlos con su esclava
sexual al final del film es la ostia: gracioso, irreverente y sádico.
Como un guiño a toda la filmografía del madrileño.
Las actuaciones no van muy halla
podemos decir que tanto Antonio Mayans como Lina Romay están
aceptables pero exagerados, el resto son totalmente olvidables.
Un film que por lo que he podido ver la
gente da poca nota pero que recomiendo a todo aquel que disfrute de
la figura de este gran genio y figura llamado Jesús Franco.
Ingrid Pitt y Madeleine Smith dos
grandes Scream Queens de los 70´s se encuentran en este film de
escaso terror, pero llevando el vampirismo al lado femenino, con
cierta tendencia al lesbianismo y las tetas. Rodada en pleno auge del
cine vampirico de la Hammer, intenta explorar el lado femenino del
ser mitológico. Dando de si una película bien filmada, con buena
fotografía y unos muy buenos decorados. Pero exenta casi en su
totalidad de sangre, y con un Peter Cushing que no realiza su mejor
papel, digamosle un añadido extra a este pseudobodrio.
Porque no
pase de ser eso una película sosa, con ciertas reminiscencias al
amor onírico, bailes de salón y alta sociedad mezclada con una
largometraje muy light de horror clásico. Esta basada en la novela
Camilla de Sheridan Le Fanu. Y creo que simplemente los desnudos del
film son los que hicieron popular en la década de los setenta el
film y también en la actualidad, porque es totalmente olvidable
salvo escasos 15-20 minutos del rodaje total.
Todo el film gira en torno a la familia
Karnstein, maldita por el vampirismo. Así arranca el film con un
joven lord que va al castillo a vengar la muerte de su hermana y allí
decapita a uno de los vampiros. Tiempo después se celebra en la zona
un baile organizado por el General Von Spielsdorf (Peter Cushing) y
al que acude Mircalla Karnstein (Ingrid Pit) y es invitada a quedarse
en el castillo junto con la sobrina del general, Laura (Pippa Steel). Poco a poco su amistad y su amor se va fraguando y poco a poco la
enfermedad se apodera de la joven Laura, pero nadie sospecha del
verdadero culpable.
Roy Ward Baker, su director, es un
viejo conocido del blog. No estamos ante uno de sus mejores films
aunque este muy bien rodado y estructurado. El guion peca más de ser
un film más allegado a un ámbito femenino de visionado que al cine
de terror clásico o scifi que nos tenia acostumbrado.
Una pena, película bien realizada pero por momentos aburrida y exenta de terror y sangre casi en su totalidad.
Aunque en principio este film se lanzo
como una imitación de río de Tiburón, el producto final es muy
bueno y remarcable. Al poco de empezar y como guiño, vemos a uno de
los protagonistas jugando a la recreativa de Jaws. El guion es bueno,
tiene gancho y el largometraje poco a poco va ganando enteros.
Una pareja desaparece cerca de una
base militar abandonada después de bañarse en una piscina. Durante
la búsqueda se vaciá la piscina para ver si están los cuerpos en
el, y se vierte al rió los seres que habitaban en ella. Sale a la
luz en lo que estaban trabajando años atrás en la base, produciendo
super pirañas resistentes al frío, al agua salada y al veneno. En
principio, iban a ser usadas para luchar contra los vietnamitas en la
guerra. Acabada esta, la base se abandono, pero el científico que
trabajaba con ellas siguió haciendo su labor.
Poco a poco las pirañas van bajando el
rió y causando el horror a su paso. Hasta llegar a una zona
recreativa (un lago) y es allí donde se desencadena la masacre
final. El ejercito persigue el bando de peces e intenta en varias
ocasiones acabar con ellos.
Joe Dante se las ingenio para que su
imitación cogiera vida y como un producto que ha dado varias
secuelas, olvidables todas, pero con un encanto propio y genuino. La
película es sangrienta, tiene buenos momentos de gore, esta muy bien
rodada. Los efectos están muy trabajados para la época. Las
actuaciones pasan muy desapercibidas por sus momentos excesivamente
sobrecargados y con una Barbara Steele, haciendo de científica del
ejercito, que no se desenvuelve en su mejor papel.
Un producto que recomiendo , porque
aunque es una película que por momentos ha envejecido ciertamente
mal puede ser muy disfrutable para los amantes del genero.
Aquí nos encontramos con uno de los
grandes prototipos de la ciencia ficción cinematográfica y que ha
servido de base para infinidad de films y series de este ámbito.
Un trabajo excepcional de su director
Roy Ward Baker, con una ambientación y unos efectos dignos de la
época pero a la par curiosos e inspiradores. El guion tiene una
fuerza increíble y no hace más que dar giros inesperados.
Realizando los trabajos para la
construcción de una nueva linea de metro encuentran lo que parecen
unos cráneos de unos seres antropomorfos. Deciden parar las obras y
llamar a un equipo de investigadores del museo. Al proseguir las
excavaciones se encuentran con algo de aspecto metálico, pero que
suponen que lleva más de 5 millones de años enterrado allí.
Deciden llamar al ejercito porque fue una zona de bombardeos durante
la segunda guerra mundial, y estos piensan que se trata de algún
artefacto o bomba lanzada por los nazis. Todo esto se vuelve más
confuso debido a que el metal es de una aleación desconocida,
responde a estímulos y las historias sobre demonios de la gente que
residía en el barrio se hacen cada vez más sonadas.
Las actuaciones no dejan de estar a un
nivel muy alto debido al gran guion que hace que la historia tenga
mucho peso, a destacar los protagonistas el Profesor Quatermass
(Andrew Keir), el Profesor Roney (James Donald) y la ayudante Barbara
Jud (Barbara Shelley). Mención aparte también para el Coronel Bree
(Julian Glover) y su conspiranoya nazi.
Todo amante de la scifi debería tener
esta película en un altar, un film que se puede ver en familia y
disfrutar de ese cine clásico al que nos tenia acostumbrada la
productora británica Hammer, un autentico mito.